
La innovación en Coniex es mucho más que inventar una nueva solución a un problema. Somos muy conscientes de que la innovación y el desarrollo pueden adoptar muchas formas y deben llevarse a cabo de forma transversal en todas las partes de la empresa para lograr una alta calidad constante.
Ser pionero en soluciones de fundición centrífuga y de acabados de superficies incluye hacer de la innovación una prioridad. Por ello, Coniex realiza una apuesta constante por la I+D+i de forma transversal y gracias a su laboratorio de última generación.
En febrero de 1999 se implantó el Sistema de Calidad para: Fabricación, comercialización de maquinaria, productos y servicios para el tratamiento de superficies y fundición, cumpliendo la norma DIN EN ISO 9002: 1994.
Desde 2003 se ha ampliado a la norma DIN EN ISO 9001, ambas certificadas por TÜV CERT.
La innovación no es una opción sino una obligación
En Coniex lo tenemos claro, a través de nuestro laboratorio y del continuo I+D+I vemos la innovación como una obligación para entregar un producto de alta calidad a nuestros clientes. Pero hay más: La innovación permite, tanto a las personas como a las empresas, interactuar en un mundo altamente dinámico y competitivo en el que es necesario estar a la vanguardia para conseguir una cuota de mercado favorable.
A continuación, se detallan algunos de los beneficios que se consiguen a través de la innovación: mejorar la imagen de la empresa ante sus clientes y su competencia, ofrecer más beneficios a los consumidores, potenciar el aumento de las ventas, fidelizar, generar barreras de entrada a los competidores, resultados positivos.
También debemos aclarar que para innovar no es necesario que la empresa u organización cuente con una gran cantidad de recursos económicos ya que el término innovación no se concentra ni se relaciona exclusivamente con realizar grandes inversiones millonarias, sino que también podemos innovar, por ejemplo, en procesos o estrategias de negocio. Podemos innovar diseñando estrategias de ahorro de costos, de logística y distribución, de revisión de insumos, de mejora en la comunicación con el cliente, de procesos de calidad, de desarrollo de nuevos productos o de mejoras de estos, entre otros.
En un entorno tan competitivo no podemos permitirnos el lujo de sentarnos y creer que nuestra idea o producto original será innovador para siempre, o que no requiere cambios o mejoras sólo porque se sigue vendiendo. Debemos ser conscientes de que si no nos actualizamos será muy difícil mantener la posición de líder en el mercado; una empresa que no innova tiene el fracaso asegurado. Es necesario que los servicios o productos que ofrezcamos se modernicen y se adapten a las demandas actuales tanto de los clientes como de los mercados, y por supuesto encontrar formas de trabajo que nos ayuden a optimizar la eficiencia de nuestros recursos. Recordemos que hoy en día todo el mundo quiere minimizar los costes, por lo que tenemos que hacer más con menos. Es fundamental que las personas de nuestros equipos estén abiertas al cambio y que promovamos en la cultura organizativa prácticas que impulsen la innovación, ya que siempre hay formas de hacer mejor lo que hacemos hoy, sabemos que lo conseguiremos trabajando duro, es decir, vigilando a la competencia, conociendo los deseos y necesidades de nuestros clientes, observando con detalle las fuerzas ambientales y gubernamentales.
En vista de lo anterior, creo que debemos desarrollar culturas impulsadas por la innovación cuya aplicación genere una ventaja competitiva en nuestras áreas de actividad. Debemos ser visionarios ofreciendo a nuestros clientes productos innovadores y también adaptando nuestros modelos de negocio a las nuevas tendencias del entorno, de manera que podamos fortalecer nuestras marcas y mantenerlas durante mucho tiempo en el mercado.
En Coniex lo tenemos claro, a través de nuestro laboratorio y del continuo I+D+I buscamos formas y mecanismos que persigan una posición de liderazgo en los mercados a través de la productividad de nuestros procesos internos.